Manuel Nónidez
Everest, 2001
Con el descubrimiento de un cadáver arranca esta historia policíaca cuyo meollo es un antiguo libro de alquimia que revela cómo conseguir la mítica piedra filosofal… y algo más. Sin sospecharlo, Alina, hija del asesinado, se ve envuelta en una turbia trama de intereses económicos y esotéricos que la obligan a protagonizar una investigación paralela a la de la policía y que pone su vida en serio peligro; en sus pesquisas, cuenta con la ayuda de su amiga Yola y con la de su novio.
La trama que construye Manuel Nonídez está bien construída, muy en la línea de novela policíaca que se viene escribiendo en nuestro país, con un lenguaje sencillo y directo, un desarrollo ágil y con una importante capacidad de mantener el suspense prácticamente hasta la última línea.
Además conviene añadir otro valor que no se debe pasar por alto: es habitual que en historias en las que la acción discurre alrededor de la localización de un objeto -normalmente un libro- el protagonista experimente a la par que la búsqueda física de ese objeto, una suerte de “viaje-búsqueda interior”, una introspección personal que le conduce a conocerse más a sí mismo y a su entorno, de forma que el hallazgo de lo buscado coincide con la culminación de una madurez ética y mental: sirvan los casos de El viaje de Baldassare de Amin Maalouf, Ex libris de Ross King o Los falsos peregrinos de Nicholas Wilcox entre otros.
En el caso que nos ocupa, Alina descubrirá aspectos de sí misma y de su relación con los que la rodean, empezando por su fallecido padre, que desconocía y que la obligarán a replantearse su visión del mundo y de su propia vida.
Esta obra supuso a Manuel Nonídez el V premio juvenil “Leer es vivir” patrocinado por la editorial Everest.
3l libro es muy interasante
me fascina
me e comprado el libro,¿es interesante?