Daniel Nesquens
Ilustraciones de Jacobo Muñiz
Madrid: Anaya, 2012
Uno de nuestros autores de cabecera firma este curioso abecedario animal que nos recuerda a otro genial bestiario, uno de sus primeros libros: Hasta (casi) cien bichos. Este álbum, que va dirigido a primeros lectores, recorre las 27 letras del alfabeto de una forma original y digna de admiración, pues cada una va acompañada de una frase (con sentido, aunque sea surrealista) cuyas palabras empiezan por dicha letra. Así, por ejemplo, tenemos “Elegantes elefantes esquían en el Everest”, “Nutrias nórdicas nadan nerviosas”, “Veinte vacas vegetarianas venden verduras vitaminadas”… En otro autor nos extrañaría, pero en Nesquens estas frases parecen sacadas de algunos de sus libros.
El texto viene arropado por las ilustraciones de Jacobo Muñiz, que casan bien con el mundo infantil y el humor absurdo de las frases, mediante collages coloristas y juegos con formas, texturas… El ilustrador, además de reflejar en la ilustración la escena que describe la frase, ha introducido otros elementos (animales, objetos, plantas) que también comienzan por la letra correspondiente, pero no son citados por el autor. Algo que puede dar mucho juego a la hora de leer este libro con los más pequeños.
Otro elemento añadido es la historia paralela que recorre este abecedario, protagonizada por Nemo Calupso y Nautilus Cousteau, que a modo de personajes secundarios viven su propia aventura en un segundo plano, hasta llegar a la escena final (“Zarrapastrosos zorrillos zurdos zampan zanahorias”), donde cobran protagonismo y presentan a bombo y platillo su Atlas Zoológico Mundial.
Un álbum original y elaborado que divertirá a todo tipo de lectores (con sentido del humor, eso sí), y que permite numerosas lecturas gracias a los detalles escondidos en sus imágenes.
Muchas gracias por mencionar el libro en Babar. Resulta muy halagador, por lo que a mí respecta.
Pienso que los genialmente absurdos tautogramas de Daniel Nesquens se bastaban por sí mismos. Nada mejor que la imaginación de cada cual para desarrollar las historias posibles que entrañan sus frases. No obstante, se me propuso ilustrarlos y procuré hacerlo lo mejor posible. He de aclarar que la idea de introducir otros elementos que comenzaran por la misma letra que protagoniza cada una de las láminas fue de Ana Sancho, la editora. A ella quiero agradecer también su amabilidad, su flexibilidad y que rechazara mi primera propuesta de portada (http://jacobo-muniz.blogspot.com.es/2010/09/abecedario-ii.html). Ello hizo que me replanteara mi estrategia de trabajo y que con ello nacieran los profesores Nemo Calypso, Nautilus Cousteau y las historias paralelas que traté de entretejer, no sé si con éxito o no, con las palabras de Daniel. Mis sensaciones con respecto a mi trabajo en el resultado final del libro no las tengo muy claras. De lo que no dudo es de la diversión que supuso para mí ilustrarlo.