El huésped dudoso

El huésped dudoso
El zoo absoluto
El Wuggly Ump

Edward Gorey
Barcelona: El Zorro Rojo, 2011

El Zorro Rojo nos ha dado una nueva alegría editando tres nuevos álbumes de Gorey, que se suman a los que ya en su día comentamos en Babar. El más conocido de ellos es sin duda El huésped dudoso (The Doubtful Guest, 1957), uno de los primeros que Gorey publicó. Una historia surrealista que nos cuenta la llegada a una casa señorial de un ser extraño, peludo, con bufanda y zapatillas de deporte, que se comporta de forma errática, melodramática, y con resultados en muchas veces cómicos para el lector:

Llevaba afuera todos los objectos que más quería
y los salvaba tirándolos en el estanque al mediodía
.

(En youtube se puede ver y escuchar el libro en inglés).

El zoo absoluto (The Utter Zoo Alphabet, 1967) es un bestiario de seres inventados, con nombres igualmente absurdos que se han mantenido en la traducción. Es algo irregular, ya que algunos de los animales están muy conseguidos mientras que otros resultan más desconcertantes, pero en conjunto es una obra interesante con algunos detalles hilarantes:

El Neapse tiene una enfermedad crónica;
se alimenta exclusivamente de tónica.

Finalmente, El Wuggly Ump (The Wuggly Ump, 1963), es de nuevo una de esas historias en las que los niños salen mal parados. Con una estructura de historias paralelas que se encuentran, nos da a conocer al monstruo que da título al libro, un ser que come “paraguas, tachuelas y fango con sanguijuelas”. Por otro lado, están los niños, felices, inocentes y cantarines, que no saben que el monstruo ha salido de cacería. Y todo acaba con un sonriente Wuggly Ump.

Este álbum tiene la particularidad del color en sus ilustraciones, algo no muy frecuente en Gorey, y que en esta ocasión da un ambiente menos tétrico, quizá para remarcar el contraste entre lo macabro y lo idílico. Además, en el texto se utilizan expresiones propias de la retahíla infantil (“Tralalarta tralalerta, el Wuggly Ump está a la puerta”) que inciden en este contraste entre lo naif y lo oscuro.

Marcial Souto, traductor de estos y de los anteriores títulos, ha mantenido la rima original de estos tres álbumes (en las ediciones de Valdemar se puede consultar el texto en inglés), adaptando en ocasiones el texto para conseguirlo. Una pequeña licencia que, dado el buen resultado, se permite. Aunque, por poner una pequeña y anecdótica pega, en alguna ocasión se le va la mano:

El Twibitt a veces descubre
que eso que mira no es una ubre

(The Twibbit on occasion knows / A difficulty with its toes.)

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